Dedicado a Alfredo Benítez en el recuerdo. Se está animando y mucho la inscripción a nuestro curso de verano dedicado a la bulería por soleá versus el amontillado de Jerez. Hoy nos vamos a detener en la figura de Tío Borrico, quien siempre sacó un extraordinario partido a esta forma del cante que heredó de un manantial directo de la jondura de Santiago. (Foto por gentileza de Pedro Carabante, de su libro ‘Diquelar’)
Antes de comenzar, os dejo un enlace a la propuesta del curso del 19 de agosto para aquellos caminantes que aun estén interesados:
Ya sabéis que Tío Gregorio en nuestros caminos es santo y devoción. De ahí que, de forma simbólica, lo nombramos padrino del programa junto a La Paquera de Jerez, la madrina. Recuerdo que la última vez que estuvimos con Alfredo Benítez en el programa escuchando a El Borrico, el maestro lloraba literalmente. Solía afirmar que en Gregorio Manuel estaban muy evidentes las características esenciales del cante de Jerez, rezumando en él con una verdad incontestable.
Vamos al vídeo en cuestión que pertenece a la mítica colección Rito y Geografía del Cante de TVE; serie documental sobre flamenco emitida por TVE2 entre 1971 y 1973. El programa estaba dirigido por Mario Gómez y tenía como guionistas a Pedro Turbica y José María Velázquez-Gaztelu, que además ejercía como entrevistador. Ellos le dedicaron un programa completo a Tío Borrico con una amplia entrevista con sus cantes que resultó entrañable. Más aún por su rodaje en el Bar Volapié del barrio de la Asunción de Jerez.
Dentro vídeo:
Lo habitual en el Borrico, así como en otros muchos cantaores jerezanos de su generación era hacer un trasiego con flamencura entre formas de bulerías para escuchar con otras de soleás cortas. Para su estudio os propongo estas apreciaciones que preparamos para el libro ‘Cien años de Tío Borrico’ (BBK) en compañía de Alfredo Benítez y Gonzalo López.
En la secuencia aparece una reunión cantaora en el reservado del Volapié con Tío Gregorio presidiendo el ceremonial. Junto a él, se aprecian las figuras de Fernando Terremoto, José Vargas “El Mono” y Juan Parrilla, entre otros. A la guitarra le acompaña Juan Moreno Jiménez, Juan Morao. Hay un joven presente que no logramos saber quién es por el tiempo transcurrido.
Advertimos de nuevo la costumbre de preparar los tercios de la soleá con algunas bulerías para escuchar. Es lo que hace Tío Gregorio con la letra “Levántate tú tempranito”, al modo de la conocida letra “Al de la Puerta Real”; es decir la bulería para escuchar corta de inicio.
Prosigue Borrico con otra bulería para escuchar, esta vez ejecuta una suerte distinta que adeudamos a El Niño Gloria: “La que me han mandao Undibé” con algunos estiramientos en los tercios que le hizo Rafael Ramos a la bulería por soleá de Antonio La Peña. Cuando hablamos de estas atribuciones, como es lógico, entendemos que el intérprete versiona lo heredado con su voz e impronta.
Entiende nuestro cantaor que ya estaba preparado el cante y, a continuación, nos regala una auténtica joya. A poco que Tío Gregorio calentara su voz, su instinto lo llevaba a la forma cantaora de Frijones que tanto había mamado en su juventud. La habla con flamencura y le añade su particular garra en “Ponte firme(?) en mi querer”, muy fiel a los esquemas originales de cómo nos ha llegado esta forma cantaora. Amontillado superior.
Se aparta de los esquemas de su tierra para adentrarse en una soleá con la estrofa “Si supiera esta gitana”. de Alcalá clásica y de inicio atribuida a Joaquín el de la Paula. Curioso como Terremoto le jalea.
Borrico se recrea mucho más en la soleá de Cádiz, tanto que suele redefinirla con su jondura. En esta ocasión es bastante fiel al origen cuando canta la popular letra gaditana: “Lo que yo quiero a mi mare”. En otras grabaciones comprobamos cómo pone algo más de su cosecha propia. (En aquella de ‘En el campo me críe‘, por ejemplo).
Otra modalidad alcalareña pero en valiente: “A un pocito me fui a echar” sirve para cerrar esta tanda de soleás con ese perfume de flamenquería que solía dar nuestro cantaor en todas sus ejecuciones por este estilo. Cuando parece que la anterior estrofa va a servir de clausura sigue con un hermoso apunte de la soleá cortita de la Serneta, a modo de cante de transición, con “Al rayar(?) el día”.
Una monumental soleá de Frijones “Yo quiero que tú me quieras” es la que definitivamente pone la coda final al hilo de soleás ante la admiración de todos los presentes en la fiesta.
Es cierto que en la toma, con en otras muchas de esta naturaleza, Tío Borrico se abandona más a la soleá corta aunque principie con la bulería para escuchar. Pero tal vez, nos va a venir muy bien en el curso para dirimir donde quedan una y otra modalidades muy parecidas en todo. Impagables los comentarios que recogimos de Alfredo Benítez tras el visionado una y otra vez de la grabación.
Acudir a la fuente de Tío Borrico es hacerlo a un manantial de la mayor pureza cantaora de Jerez y un gran adalid de sus decires jondos. Desde nuestro caminos se recomienda hacer uso de esta entrada con un buen amontillado de Jerez.
José María Castaño @Caminosdelcante